Al norte de Chile podemos encontrar el desierto de Atacama que está rodeado de diversas regiones como Arica, Antofagasta, Parinacota, Tarapacá, entre otros lugares alrededor de un área de 150.000 kilómetros cuadrados.
Se dice que hace 3 millones de años, este desierto antes era un lecho marino que con el tiempo fue cediendo del otro lado de la cordillera de los Andes, causando que este extremo se secara por completo, y donde las mismas cordilleras impidieron el paso de nubes de lluvia.
Solamente algunas especies de cactus y aves como picaflores, tórtolas y algunas palomas son las que más abundan dentro de lo que cabe en este árido lugar, aunque también hay algunos mamíferos como zorros y guanacos, muy al contrario de la gran diversidad que se encuentra a unos kilómetros fuera del desierto.
Pero este desierto está lejos de ser un lugar que nadie visitaría, pues de hecho posee increíbles lugares que han dejado maravillados a todo tipo de científicos, que van desde un desierto de flores, una laguna con el agua roja como la sangre y salares.
Incluso encontramos vestigios de dibujos en la tierra que abarcan kilómetros y que pueden verse desde el espacio, su elaboración es un misterio y las posibles explicaciones va desde antiguas civilizaciones, hasta vida extraterrestre.
Además de todo esto, también hay una zona de este desierto que está cubierto de cristales bautizado como ‘campos de cristales’ que tiene una extensión de 75 kilómetros de pura arena combinado con placas de vidrio de silicato que nadie había podido explicar su procedencia, hasta ahora.
Una bola de fuego impactó la zona dejando solo cristales incrustados en el suelo
Peter Schultz, Scott Harris, Sebastián Perroud, Nicolás Blanco y Andrew Tomlinson, son los expertos que habían estado estudiando muy de cerca este extraño fenómeno para conocer su procedencia, y este 2021 finalmente publicaron sus conclusiones en la revista científica Geology de la Sociedad Geológica de América.
Aquí nos explica que el evento parece haber sucedido hace 12.000 años, donde un calor sumamente intenso pudo transformar la arena del lugar en cristales, de eso no había duda. Pero, ¿qué pudo haber sido lo suficientemente caliente y titánico para provocar este efecto a lo largo de 75 kilómetros?
La teoría de que fuera un meteorito tendría mucho sentido si tomamos en cuenta que este desierto ya ha mostrado indicios de minerales y elementos de meteoritos, que precisamente son similares a las partículas que la NASA tiene en su poder, específicamente de un cometa llamado Wild 2.
Así que los científicos tienen la certeza de que un cometa muy similar a este pudo haber impactado nuestro planeta hace miles de años, y fue un daño catastrófico y masivo que nunca se ha visto en tiempos modernos.
Como resultado de la radiación térmica del meteorito, se obtuvieron vidrios con un color negro y verde que han creado una vista espectacular para quienes visitan este lugar entre la cordillera de los Andes y de la Costa.
Si bien también hay volcanes que pudieron haber generado ese calor, resulta que la composición de la lava o magma que pudo haberlo causado no cuenta con los elementos necesarios para convertir la área en cristales en este formato.
Otra teoría sugería que incendios hace cientos de años cuando antigua vegetación aún existía a las orillas de los últimos ríos, y que pudieron haber causado un incendio forestal que dejaran estos vidrios.
Pero otra de las características de los cristales es que parece que fueron retorcidos, aplastados y enrollados mientras aún estaban al rojo vivo y eran moldeables, lo que sugiere que tuvo que haber una bomba de aire impresionante para causar tal deformidad, algo que ningún volcán o incendio forestal podrían reproducir.
Además, un estudio de elementos demostró la presencia de minerales como la troilita (sulfuro de hierro), la cubanita (hierro y cobre) y otros elementos que solo podrían existir a 1.600 °C, una temperatura que un incendio jamás podría alcanzar, y que además son minerales frecuentes en cometas como el Wild 2 y otros meteoritos.
Si bien todas las observaciones son bastante concluyentes con que este campo de cristales fue provocado por un antiguo impacto de meteorito, las investigaciones seguirán adelante para tener una edad exacta de este evento.
Saber este dato podría darnos pistas sobre varios sucesos en esta zona, por ejemplo, hace 12.000 años que se estima sucedió este impacto coincide con un hueco en la línea del tiempo geológico donde desaparecieron los grandes mamíferos prehistóricos.